CLICK HERE FOR BLOGGER TEMPLATES AND MYSPACE LAYOUTS »

martes, 30 de junio de 2009

Otros mundos...


"Hay otros mundos, pero están en éste" (Paul Éluard)

“La realidad no está obligada a ser verosímil” Leo esta frase en una crítica literaria que me interesa bastante poco, pero me hace reflexionar sobre el contenido de dicha frase…
-
¿Por qué debería ser verosímil mi propia realidad? ¿Para quién? Y me hago esta pregunta porque, claro, si yo tuviera que esforzarme porque algo relativo a mi vida resultara verosímil, estaría actuando en aras de un enjuiciamiento externo. Lógicamente, no necesito demostrarme nada que sea producto de mi libre elección a través de unas coordenadas también establecidos por mí, aunque esté sujeta como cualquiera a normas sociales, a leyes, a la posibilidad de errar, pero en el reconocimiento de ese error, si existiera, ya estaría abierta la puerta al propio aprendizaje.

Sí, mi realidad (refiriéndome siempre al presente) es incuestionable, ya que es lo que percibo sobre mi mundo, tanto interior como externo, de manera que, mi forma de vida se sustenta o es consecuencia de mi percepción de la misma a todos los niveles, apoyada por mis creencias y por mi libertad de elección.

Otra cuestión es reconocer que existe una evolución lógica a través de la experiencia y esto me lleve a considerar actitudes, valores, circunstancias, que quizá en el pasado no percibiera o no tuviera en cuenta porque no se encontraban a mi alcance, por lo tanto, no seré la misma (siéndolo a nivel esencial) hoy que hace un tiempo, y creo sinceramente, que es lo deseable porque venimos a este mundo para aprender

Ahora bien, si tu realidad y la mía no coinciden, me abstendré de cuestionar tu verdad o de juzgarte, porque, aunque vivamos en el mismo universo, tú tienes tu mundo y yo el mío
-
Y esto no puede intercambiarse,
aunque podamos compartirlo…

domingo, 28 de junio de 2009

FALSO TRIUNFO

Despertar de Elo

Hay una actitud que actualmente fomenta el sistema para conservar a los sujetos en sus redes que consiste en impulsar un modo de vida, una actitud muy específica para dar una imagen atractiva, amable, la imagen del sí mismo que idílicamente se desea, que suele ser imitación de otro/s que ostenten altas cotas de éxito social o grupal, y dicho sujeto termina creyéndose sus propias mentiras, para andar por este mundo donde la imagen es lo que cuenta y lo interior se esconde detrás de una (correcta) religiosidad no menos falsa. El disfraz puede alcanzar tal cota de verosimilitud que la persona llega a pensar en una evolución lógica de un punto donde se consideraba nada al del éxito fantasma que no reconoce como tal porque nunca es suficiente.

El problema, pienso yo, es el encuentro con la propia realidad, pero también eso se ahoga en los laberintos del ego que llegado a un determinado punto, ha engordado de tal forma que proporciona a la persona una especie de sueño vital del que llega a ser difícil despertar, y lo peor es que ese sueño, va matando la verdadera existencia, la esencia, la conciencia, dando paso a algo parecido a un ser mezcla de marioneta y zombi…

Todos conocemos unos cuantos “muertos” de este tipo, y ostentan una falsa humildad acompañada de gran seguridad y empuje en sus actuaciones, suelen ser muy apreciados y seguidos durante un tiempo porque son maestros en golpes de efecto. El único detalle que hace que se les reconozca, es que no soportan que nadie, desde su corta y singular perspectiva, los iguale, los supere o les haga sombra.

En fin, lo único que se me ocurre desear a esta pobre gente, víctimas y verdugos de sí mismos en este mundo “tan desarrollado”, es que un día despierten y la realidad les inunde aunque se encuentren solos, porque esa "soledad", propiciará el encuentro con su esencia perdida y dibujará el inicio del camino a la felicidad acompañado del auténtico triunfo.

miércoles, 24 de junio de 2009

Una noche la tristeza, se irá sin avisar....


Hoy (ayer) ha sido uno de esos días extraños, por lo poco habitual, aunque lo cotidiano se haya repetido como siempre, sin embargo, quizá haya sido mi forma de percibirlo lo que lo ha hecho diferente y desde luego, especial.

A media mañana alguien le puso una plantita con flores blancas sobre la CPU del ordenador: Absorbe las radiaciones, le dijo, regalándole también una preciosa sonrisa.

Al salir a la calle, terminada la densísima jornada laboral, la luz del incipiente verano la cegó haciéndola entornar los ojos; inmediatamente introdujo la mano en el interior del bolso para sacar las gafas de sol mientras una ráfaga de viento tórrido revolvía su indómito pelo que ella, de manera refleja, echaba hacia atrás continuamente como acariciándolo con la mano derecha…

Respiró hondo mientras levantaba la vista hacia el cielo como para olvidarse de los centenares de coches cuyos motores rugían acompañados del sonido estruendoso de las insistentes bocinas y se colocó los auriculares, pulsando el play del MP3…

Se quedó parada en medio de la avenida olvidando el calor, la luz, el pelo revuelto y los molestos ruidos, todo lo que no tuviera que ver con el maravilloso cielo azul, que majestuoso, se ofrecía solo para que ella lo contemplara en aquel preciso instante…
-
…YO AL VERTE SONREIR, SOY EL NIÑO QUE AYER FUI…
-
Todo se detuvo en aquel momento, todo lo que no tuviera que ver con volar a través de su mirada hasta alcanzar la estela que como un algodón estirado por manos invisibles cruzaba el cielo de lado a lado, dibujada por el paso de un reactor del tamaño de una hormiga…
-
… LA, RA, RA, RA, LA, RA, RA, LA, LA, LA…
-
Bajó el volumen del aparato, casi hasta no percibir, prácticamente, la letra de la canción, que, intermitentemente (dependiendo de la intensidad del vuelo de su mirada), resonaba en su oído; con una carrerita algo ridícula, que era todo lo que le permitían los tacones de sus zapatos, cruzó el lateral de la avenida y alcanzó el bulevar central adornado con dos inmensas hileras de acacias centenarias cuyas copas casi se tocaban formando un arco que hacía que la temperatura fuera hasta agradable a diferencia de la sensación ardiente del otro lado de la calle…

… Síiii, mi corazón siempre estará donde esté tu corazón….

… Túuuu, no dejes de jugar, no, pares de soñar….

… Queee, una noche la tristeza se irá sin avisar,

Y al fin- sabrás- lo bello- que- es- vivir…

De pronto, sus pies despegaron del suelo, y sus pasos, a pesar de los tacones, se sucedieron como si levitara, aún impresionada el alma por la belleza de aquel sendero urbano de luces, brillos y sombras que recorría con esa especie de devoción y entrega que sólo puede darse en situaciones extraordinarias.

… Me muero por suplicarte que no te vayas mi vida…
… Me muero por abrazarte y que me abraces tan fuerte
… Palabras que llegan a este pobre corazón,

Voy sintiendo el fuego en mi interior.

Al cabo de unos quinientos metros en los que un bienestar inimaginable por nadie que no fuera ella misma, había embargado todos sus sentidos haciéndola tener una sensación de felicidad difícilmente explicable en aquel entorno, giró a la izquierda abandonando la avenida de las acacias, cruzó por el semáforo hacia el otro lado y antes de llegar al Metro, casi sin saber o más bien pensar en el paso siguiente, se detuvo debajo de un frondoso castaño blanco, a unos cuatro metros de distancia del bordillo, esperando el cambio del semáforo.

… Siempre serás, bienvenido a este lugar… Apagó el Mp3 y lo guardó en el bolso.

Fue entonces cuando percibió que varias personas que se encontraban también esperando a que el “hombrecito verde” apareciera en la acera de enfrente, la imitaron; miró a izquierda y derecha y sin saber cómo ni por qué, tuvo la agradable sensación de ser parte de un conjunto que abarcaba tanto al castaño como a las tres personas que se encontraban debajo de la frondosa copa cuyas hojas casi acariciaban sus cabezas.

Entró en la bonita y espaciosa estación de Metro con nombre de médico y pensó que había mucha menos gente de la que habitualmente percibía como algo molesto en su ir y venir, aunque quizá no fueran menos; lo que ocurría, era que, todos esos desconocidos le parecían agradables por aquella especie de empatía por la que se sentía inundada …

Al llegar a su casa comió un puré frío de vegetales casi sin darse cuenta de lo que hacía, ya que el momento formaba parte de una de esas ocasiones en las que alimentarse, o más bien, acabar con el vacío del estómago, era el único objetivo de la comida. A continuación se sentó en el sofá y cerró los ojos y, en silencio, deseó soñar con la realidad, no sin antes pensar que ésta había sido mejor que cualquier sueño agradable.

Quizá, se dijo en silencio, la hoguera con la que anoche soñé, ha terminado con la monotonía de la que tantas veces reniego sin apreciar esos pequeños detalles que se esconden entre lo cotidiano.

Pensó en una estrofa de la primera canción que escuchó al salir del trabajo:

“Que una noche la tristeza, se irá sin avisar y así sabrás lo bello que es vivir”

viernes, 19 de junio de 2009

DESCANSA EN PAZ


Ha muerto Vicente Ferrer, un hombre bueno que dedicó su vida entera a los más necesitados.

El mundo debería tomar ejemplo de lo que significa luchar por la justicia y la igualdad, con el mayor de los respetos, con humildad, mezclándose con los necesitados y siendo uno más, y sobre todo sin imponer ídolos ni dioses.

Descansa en paz, maestro

miércoles, 17 de junio de 2009

La vida sigue.

Llego al trabajo tan contenta después de haber recorrido a pie los seis Km que lo separan de mi casa, pacíficamente, escuchando un poco de música y disfrutando de esos primeros rayos de sol. Como cada día, leo los periódicos, pero hoy, y sin que hayan cambiado sustancialmente los acontecimientos cotidianos, me entristece lo que leo, porque, por más que la vida comience cada amanecer, el mundo no cambia ni existen, al menos en este momento, atisbos de que cambie.
-
Pienso que un observador externo, y no necesariamente ese “triángulo con un ojo implacable”, si esta situación pudiera darse, llegaría a la conclusión que estamos en guerra, absolutamente locos, llenos de rencor, que la humanidad corre un peligro irremediable de extinción.

“Sí, yo vivo y actúo como mi conciencia me dicta y mi mundo es el que yo elijo dentro de lo que hay, procuro seguir adelante con mis valores, evolucionando con las herramientas que el devenir me ofrece…” Muchos como yo, se harán, en este instante o en otro, la misma reflexión pero esto no es un consuelo…


¿Quizá no debería haber leído los periódicos? Y qué hacer, meterme en mi isla y no enterarme de esa otra realidad? Sería tan absurdo y tan irresponsable…


En fin… ¿Alguien me puede ofrecer una buena noticia?

-
Quizá mañana…
-
Y mientras llega mañana…

-
Cerraré los ojos un instante, sólo para descansar, sólo para imaginar que el mundo es luminoso, altruista, que no hay injusticias, que la igualdad y la fraternidad ondean en el horizonte del alma humana…

Sólo un instante, sin querer engañarme, sin negar la realidad…
-
Me permitiré unas lágrimas (interiores) que rediman la amargura, la decepción y el acecho de desesperanza y vuelvo…

Y mientras cierro los ojos
-
La vida sigue… CON MI AGRADECIMIENTO POR TU RESPUESTA, aminuscula.blogspot.com Creo que en tu comentario está la clave de todo, y sí, entrego mi energía a la belleza, al milagro de la vida y a esos albaricoques tan buenísimos; el resto para quien quiera elegirlo...
-
"Mira, es tan realidad lo que lees en los periódicos como el hecho de que pronto nos van a nacer más gatitos y que el milagro de la vida se repite a cada instante, porque entre hoy y ayer han debido nacer muchos niños y otros han sido concebidos. Y que hoy hemos abierto los ojos y las células que forman nuestros cuerpos siguen en marcha aunque yo hayamos estado dormidas y que todos los árboles están verdes este mes, completamente verdes, y que la siesta en verano es deliciosa y que los albaricoques saben riquísimos.
Todo es verdad y nada cambia, ni el horror ni lo bello. ¿A cual de las dos verdades vas a aportar tu energía con tus pensamientos? ¿En qué frecuencia quieres estar?
-
No es cerrar los ojos, Luz, pero tu tristeza no ayuda a nadie, sino que añade más tristeza al mundo. Es sólo eso. Si crees que hay escasez de belleza, pon tu granito de arena"

viernes, 12 de junio de 2009

Dedicatoria


A medida que voy cumpliendo años, la vida me parece más apasionante por muchas razones, principalmente, porque voy entendiendo de qué va todo esto, aunque a lo largo del tiempo mis metas han ido cambiando hasta el punto de llegar a no tener metas, aunque haya hecho descubrimientos que me han conducido a plantearme de nuevo la vida y comenzar desde el principio más de una vez, incluso a pesar de mis logros personales y digo “a pesar” porque he conseguido que éstos no me hayan hecho tener la sensación de que he llegado al final de nada.

La madurez tiene sus ventajas, entre otras la de poder llegar a la conclusión de que no merece la pena competir por nada, que los mejores triunfos consisten en aprender de las derrotas y que todas y cada una de las “victorias” alcanzadas sólo las conoce una misma porque no tienen nada que ver con lo que socialmente se consideran victorias.

Hoy puedo decir que necesito muy poco para vivir, lo que traduzco en que soy inmensamente rica porque no me falta absolutamente nada de lo que no tengo

Por todo lo dicho, dedico todas "mis derrotas" a mis seres queridos

Y doy las gracias, sinceramente, a mis enemigos.